Qué hacer en caso de una fractura en un niño

Cuando un niño sufre una fractura, es crucial actuar rápidamente y correctamente para minimizar el daño y facilitar la recuperación. Las fracturas son comunes en la infancia debido a la actividad física y la tendencia de los niños a correr, saltar y jugar de forma enérgica. En este artículo, discutiremos qué hacer en caso de una fractura en un niño, desde cómo reconocer los signos de la lesión hasta cómo brindar apoyo durante el proceso de recuperación.

Reconocer los signos de una fractura en un niño

Cuando un niño sufre una fractura, es importante reconocer los signos y síntomas de la lesión para poder tomar las medidas adecuadas. Algunos de los signos más comunes de una fractura incluyen hinchazón, dolor intenso, deformidad evidente, incapacidad para mover o soportar peso en la extremidad lesionada y posiblemente una herida abierta. Si observas alguno de estos síntomas, es importante actuar de inmediato.

Mantener la calma y tranquilizar al niño

Lo primero y más importante en caso de una fractura en un niño es mantener la calma y tranquilizar al niño. Los niños pueden asustarse y angustiarse al experimentar dolor y ver una lesión. Habla con calma y asegúrale al niño que todo estará bien y que recibirán la ayuda adecuada.

No mover o manipular la extremidad lesionada

Es crucial no mover ni manipular la extremidad lesionada, ya que esto puede empeorar la lesión. Si crees que el niño tiene una fractura, evita cualquier movimiento innecesario y mantén la extremidad en la posición en la que la encontraste. Inmovilizarla puede ser de gran ayuda.

Llamar a emergencias o acudir al hospital inmediatamente

Una vez que hayas reconocido los signos de una fractura en el niño, debes llamar a emergencias o acudir al hospital de inmediato. Es importante que un profesional médico evalúe y trate la lesión. Llama al número de emergencias local y sigue sus instrucciones o lleva al niño al hospital más cercano si te es posible.

Aplicar compresión si hay una herida abierta

Si la fractura ha causado una herida abierta, es importante aplicar compresión para controlar el sangrado. Usa un paño limpio y presiona suavemente sobre la herida hasta que el sangrado se detenga. Luego, cubre la herida con un apósito estéril. Es fundamental mantener la herida limpia y protegida de la contaminación

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Elevar la extremidad lesionada si es posible

Si es posible, eleva la extremidad lesionada para reducir la hinchazón. Coloca una almohada o cojín debajo de la extremidad para elevarla. Esto puede ayudar a reducir la hinchazón y el dolor hasta que se brinde atención médica adecuada.

No intentar poner en su lugar ningún hueso fuera de su posición

Es importante no intentar poner en su lugar ningún hueso que esté fuera de su posición. Manipular una fractura puede causar más daño y empeorar la lesión. Es tarea del personal médico calificado y con experiencia corregir la posición de los huesos.

Controlar el dolor con analgésicos recomendados por un médico

El dolor es una parte inevitable de las fracturas y puede ser muy intenso para el niño. Para controlar el dolor, sigue las recomendaciones de un médico y administra analgésicos según las indicaciones. Asegúrate de utilizar los medicamentos apropiados para el niño y en las dosis correctas.

Seguir las instrucciones del personal médico en el hospital

Una vez que lleguen al hospital, el personal médico evaluará la lesión del niño y determinará el tratamiento apropiado. Sigue todas las instrucciones y recomendaciones del personal médico. Pueden realizar radiografías para confirmar la fractura e inmovilizar la extremidad con una férula o un yeso. Asegúrate de comprender completamente las instrucciones de cuidado y rehabilitación en el hogar.

Brindar apoyo emocional y físico al niño durante el proceso de recuperación

El proceso de recuperación de una fractura puede llevar tiempo y puede ser difícil para el niño. Es importante proporcionar apoyo emocional y físico durante este período. Escucha las preocupaciones y miedos del niño y bríndale consuelo. Ayúdalo con las actividades diarias que pueda tener dificultades para realizar y sigue todas las indicaciones de cuidado y rehabilitación en el hogar.

Conclusión

En caso de una fractura en un niño, es importante reconocer los signos de la lesión, mantener la calma, no mover la extremidad lesionada y buscar atención médica de inmediato. Siguiendo las instrucciones del personal médico y brindando apoyo emocional y físico al niño durante el proceso de recuperación, ayudaremos a que se recupere correctamente. Recuerda que siempre es mejor dejar que los profesionales manejen las fracturas y no tratar de manejarlas nosotros mismos.

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